Movimiento es medicina y metáfora al mismo tiempo, una herramienta que alcanza todos los lenguajes, todas las culturas y todos los grupos de edad para transformar el sufrimiento en arte, el arte en consciencia y la consciencia en acción.

Allá donde se practican los 5Ritmos, se crea una comunidad que nace para la danza, en la que moverse, sudar, transformarse, dejarse sostener y ofrecer un espacio seguro para cada un@ de nosotr@s donde poder sacudir lo que el ego quiere sostener,  despertando así a lo impredecible, a lo fascinante, a esa parte salvaje en donde nuestro Yo más auténtico camina y pide ser despertado.

La danza de la Ola (sucesión natural de los 5Ritmos) nos permite volver al cuerpo, a su lenguaje y a la experiencia cíclica que vive en nosotros y su alrededor. La danza como meditación, como lenguaje, como herramienta para redescubrirnos una y otra vez.

Al bailar 5Ritmos se pueden rastrear percepciones y recuerdos, buscar gestos y formas, y sintonizarnos con los instintos y las intuiciones. Se revelan formas de expresar creativamente emociones sentidas y reprimidas (ansiedad, vulnerabilidad, éxtasis, etc.), iniciándonos nuevamente en la sabiduría de nuestro cuerpo y desatando el poder curativo del propio cuerpo y movimiento.